Un buen Plan de Comunicación de crisis es como un buen ejército, nos da seguridad ante cualquier amenaza. Los peligros hoy siguen siendo en el fondo los mismos que en el pasado para cualquier empresa o marca: la puesta en cuestión de la calidad de un producto o de un servicio determinado; del buen hacer de la corporación, de sus propietarios, accionistas o directivos. Sin embargo, los escenarios de conflicto son más amplios, indefinidos y abundantes. Las formas han cambiado. Las redes sociales se parecen en este sentido a los montes de mi tierra cántabra, donde se escondían los guerrilleros de pueblo, fornidos y poderosos, sin que nadie pudiera alcanzarles. Ni los árabes llegaron a conquistar esa tierra por desconocimiento del terreno. Puede ocurrir lo mismo en estos tiempos con los ataques que se fraguan en Twitter, en Facebook o desde otras redes sociales. El que no conozca este nuevo escenario, ni actúe en este territorio virtual, puede perder la batalla si la hubiera o recibir balazos sin capacidad de respuesta. En Medialuna hemos creado un Protocolo de actuación en Twitter, con mecanismos de actuación ante situaciones difíciles que pudieran poner en peligro- con o sin razones evidentes- la imagen de una marca o compañía. Los ciudadanos son hoy los fornidos guerrilleros escondidos en la nube. Las empresas no tienen todavía sus ejércitos preparados para defenderse en la Red. Qué contradicción.