El jueves 21 de enero organizamos en la cámara de Comercio de Bilbao el primer seminario Juncker, impulsado por la Comisión Europea y el Banco Europeo de Inversiones. Volvimos a hacer equipo, Arturo y yo, atendiendo a los medios de comunicación, recibiendo invitados y gestionando la participación de los empresarios y directivos más relevantes del País Vasco. Así, en completa sintonía, después de casi dos décadas de vidas paralelas, compartimos trabajo y amistad.
Me vino ayer a la memoria la misma impresión de aquella (mi primera) vez en el oficio de la comunicación: “Serenidad, madurez, las cosas claras, todo bajo control”. Era 1992 cuando, sentados en torno a una mesa redonda de Burson Marsteller, recibía instrucciones suyas para iniciarme en las tareas de comunicación. Sentí la tranquilidad de entonces, de saberme en buena compañía, en confianza, sin sobresaltos.
Hay pocos tipos que sepan conjugar de forma tan discreta inteligencia y sencillez. Como, según me confesó a medio entender, en el café, siempre fui yo ante sus ojos de consultor experto “mujer con ambiciones e inquietudes”, me alegra tener su amistad entre mis logros más valiosos. Gracias, Consejeros del Norte. Gracias, Lander Mendieta por vuestra colaboración y encuentro. La próxima vez, no falla un buen vino y un bacalao al pil pil :))