“Todas las familias felices se parecen unas a otras; cada familia desdichada lo es a su manera”. Qué importante la primera frase de un libro, el comienzo de cualquier empresa humana. Ese comienzo de la novela de Tolstoi, Ana Karenina, a menudo me viene a la memoria cuando imagino cualquier principio. Empezar con buen pie. Sabio consejo. Me alegra que Medialuna arrancara sanamente en 2000; y con cero clientes de otras empresas, quiero decir, sin `restar´ nada a la ajena competencia. Creo que aquel primer año fue digno, merecedor de una próspera continuación. Aunque en una empresa uno tiene siempre la sensación de estar en el principio, construyendo, volviendo a comenzar; de vez en cuando conviene acordarse de cómo fueron los primeros años. Tal vez para buscar la fortaleza del escritor en su primera frase y seguir con el argumento. En cualquier caso y volviendo a la idea principal de Tolstoi sobre las familias: Qué razón. Ahora que estamos de vacaciones, más aún podemos observarlo.